Los jóvenes de entre 18 y 24 años dedican en promedio más de 5 horas al día a su Smartphone. La lectura en formato clásico no forma parte de su tiempo.
¿Cómo pueden los creadores de relatos tradicionales ser relevantes en el tiempo de ocio que las nuevas generaciones pasan en su móvil?
Con historias de ficción muy cortas y ágiles. Y en formatos que les son familiares en su móvil.
Se disfrutan en pocos minutos y son adictivas.